Irán condiciona su regreso al acuerdo nuclear de 2015 al cumplimiento previo de las demás potencias

Irán condiciona su regreso al acuerdo nuclear de 2015 al cumplimiento previo de las demás potencias

Esmail Baqaí, portavoz de Exteriores de Teherán, ha asegurado en una entrevista que Teherán volverá a cumplir el acuerdo nuclear de 2015, solo si todos los demás hacen lo mismo.

En una entrevista exclusiva con el diario británico The Guardian, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Esmaíl Baqaí, declaró que la República Islámica está dispuesta a retomar el cumplimiento del Acuerdo Nuclear de 2015 (JCPOA), conocido como “Plan Integral de Acción Conjunta”, pero solo si todas las demás partes involucradas hacen lo mismo primero.

Baqaí subrayó que el acuerdo cuenta con el respaldo de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, que fue propuesta por Estados Unidos y aprobada por consenso, incluidos votos a favor de potencias europeas como Reino Unido y Francia. “Si tuvieran un mínimo de buena fe, intentarían implementar nuevamente sus compromisos bajo el JCPOA”, afirmó.

El portavoz de la Cancillería de Irán también se refirió a la relación de Teherán con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), indicando que las negociaciones técnicas aún continúan y que es necesario elaborar una nueva agenda. Sin embargo, expresó una “preocupación seria” por lo que Teherán percibe como el “enfoque politizado” de la agencia.

Baqaí denunció que el último informe del OIEA fue “abusado” por Estados Unidos y tres países europeos para promover una resolución que acusaba a Irán de incumplimiento, lo que, según él, creó un “terreno psicológico” que Israel y EE.UU. explotaron para lanzar una “agresión” menos de 24 horas después de su aprobación.

Finalmente, el diplomático destacó la unidad nacional iraní frente a lo que calificó como una “agresión injusta”, subrayando que, ante tal mediad bélica, cada ciudadano del país comprendió la necesidad de defenderse.

Al mismo tiempo, reconoció que muchos países de la región están profundamente preocupados por las consecuencias de una escalada y están empleando sus “buenos oficios” para evitar que la situación se deteriore aún más, un esfuerzo que, según sugirió, Teherán observa con atención.